La Delegación de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Priego de Córdoba ha puesto en marcha un nuevo servicio de reciclaje con la colocación de 20 contenedores de recogida de aceites domésticos por distintos puntos del casco urbano y en cuatro aldeas del término municipal y que gestionará la empresa prieguense ‘Bionavas’, adjudicataria del servicio durante una año.
La Delegación de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Priego de Córdoba ha puesto en marcha un nuevo servicio de reciclaje con la colocación de 20 contenedores de recogida de aceites domésticos por distintos puntos del casco urbano y en cuatro aldeas del término municipal y que gestionará la empresa prieguense 'Bionavas', adjudicataria del servicio durante una año.
“Ya tenemos un nuevo servicio más para la ciudadanía de Priego, demandado desde hace mucho tiempo, por la necesidad de reciclar el aceite de nuestras casas en una localidad donde su consumo es abundante”, ha manifestado la regidora prieguense durante la presentación de los nuevos depósitos, quien ha estado acompañada por la concejala-delegada de Medio Ambiente de la institución municipal, Cristina Casanueva.
Con respecto a la empresa local a la que se le ha contratado este servicio de reciclaje, Ceballos ha explicado que “la empresa solicitó al Ayuntamiento la posibilidad de gestionar este servicio ya que cuenta con acreditada experiencia en este sector”.
Al mismo tiempo, la máxima responsable del municipio ha querido subrayar que “al Ayuntamiento de Priego de Córdoba no le supondrá coste alguno, sólo se les cede el sitio para la ubicación de los contenedores que pondrán la adjudicataria junto a su gestión”. En cuanto a la contratación de personal, ha apuntado que “esto corresponderá a la empresa contratada la selección del mismo”.
Las emplazamientos de los nuevos contenedores en la ciudad se localizan en el polígono La Salinilla; las barriadas 28 de Febrero, Buenavista, Inmaculada, Las Caracolas y Los Almendros; y las calles Reverendo Domingo, Trasmonjas, Ramón y Cajal, Córdoba, Haza Luna; también en la zona del pabellón de Deportes, Paseo de Colombia, parque multiusos Niceto Alcalá-Zamora y Torres y en el Centro de Salud.
En cuanto a las aldeas, los nuevos depósitos se han colocado en los núcleos de mayor población como son Las Lagunillas, Zamoranos, Zagrilla y La Concepción. “Los servicios técnicos municipales han sido los que han elegido las zonas de emplazamiento de los contenedores de aceite usado para que haya el menos impacto visual y, a día de hoy, sólo están pendientes de colocar los depósitos de los núcleos rurales”, ha comentado la alcaldesa de la ciudad.
Por su parte, el gerente de la empresa Bionavas S.L., Antonio Hidalgo, ha expresado a la institución municipal su agradecimiento porque “el proyecto de reciclaje del aceite usado llegue a buen puerto, porque es muy interesante para toda la población”.
CARACTERÍSTICAS
Los 20 contenedores de recogida de aceites domésticos presentan un acabado de hierro, con una cámara de aire de 5 centímetros con depósito principal y, en la parte superior, cuenta con una apertura metálica. La altura es de 1,20 metros con una anchura y altura de 0,60 metros, respectivamente, y una capacidad de 400 litros. “Reúnen todos los estándares mínimos de calidad y son totalmente ignífugos, antivandalismo y estancos, además de una identificación clara para el uso que se les pretende dar”, han informado desde la empresa.
Además de la puesta de los contenedores, la empresa contratada deberá limpiar y mantener los depósitos (al menos una vez quince días), realizar campañas de sensibilización medioambiental y de orientación al reciclaje destinadas a la población, recoger periódicamente el aceite usado (una vez al mes) y el traslado y entrega del producto para su reciclado a una empresa especializada y homologada para su valoración, control y tratamiento.
Según ha detallado el gerente, el proceso que se sigue para reciclar el aceite usado que recogen estos nuevos contenedores es “mediante una bomba que aspira el líquido, que luego se vaciarán en una planta de 10.000 litros y, después, se derivará a las plantas de biodiesel para que se convierta en biocombustible, tenga un nuevo ciclo de vida y no se contamine”. Ha reseñado que el usuario debe verter “sólo el líquido vegetal, sin necesidad de recipiente”.